La firma local CONSULTA, Sociedad Anónima de Capital Variable, fue contratada por el Fondo de Conservación Vial para efectuar la Supervisión del Proyecto “Mantenimiento Rutinario de los Grupos 5 y 6 de Vías Pavimentadas, ubicadas en la zona central de El Salvador”.

El Proyecto comprende el diseño y la construcción de dos tramos de carretera en la zona urbana de la ciudad de San Miguel y un tramo rural de la carretera CA-1 de San Miguel al caserío Siramá en la intersección de la carretera Panamericana (CA-1) con la carretera del Litoral (CA-2).

El primer tramo urbano de aproximadamente 2.00 Km., inicia en la intersección de la Ruta Militar y la CA-1 hasta el punto kilométrico 136+875 cerca del Puente Urbina. El segundo tramo urbano de 4.5 Km. comprende la Avenida Roosevelt e inicia en la misma intersección hasta el punto kilométrico 141+900 después de la rotonda en el desvío a El Delirio. Estos tramos están diseñados para rehabilitarlos en concreto asfáltico, ampliando el primer tramo a cuatro carriles incluyendo dicha ampliación al puente Toledo sobre la Quebrada El Jalacatal.

En el tramo rural de 33.70 Km. se hará ampliación del rodaje a 7.50 m con hombros de 1.50 m y una capa de rodadura de concreto hidráulico de características estructurales comunes.

Las características geométricas de los tramos no serán alteradas, pero se permitirá obligadas variaciones al alineamiento horizontal por causa de la ampliación antes indicada.

CARACTERÍSTICAS DEL PROYECTO

Este Proyecto por ser modalidad de “llave en mano“presenta dos fases de desarrollo, la primera fase se refiere al diseño de las obras a ejecutar para obtener una ruta de circulación vial en óptimas condiciones para el tráfico motorizado en un período de vida útil de 25 años, y la segunda fase correspondiente a la etapa constructiva del diseño previamente aprobado . Las obras deben complementarse entre si de tal manera, que conformen un Proyecto integral de carretera primaria en los tramos urbanos y de carretera secundaria en el tramo rural.

El primer tramo urbano en la Ruta Militar será ampliado a cuatro carriles en 14.00 m de rodadura, para lo cual se resolverán todos los problemas de derechos de vía, drenajes, redes de transmisión de energía y telefonía que sean necesarios para la ejecución de las obras. Así también la ampliación del puente Toledo a cuatro carriles de circulación vehicular se le agregan aceras laterales de 1.00 m de ancho. En el segundo tramo urbano en la Avenida Roosevelt se mantiene con el ancho actual de la vía, bajo las mismas condiciones de diseño del primer tramo.

El tramo rural se origina en la rotonda de las bifurcaciones a El Delirio y Siramá, con un ancho de rodaje actual de 6.30m el cual será ampliado en toda su longitud a dos carriles de 3.65m cada uno y hombros de 1.50 m en ambos laterales del rodaje. La estructura del pavimento es en concreto hidráulica y deberá ser igual para el rodaje y los hombros.

Se considera aceptar mínimas variaciones en la geometría horizontal como en la vertical toda vez que las modificaciones sean positivas para las condiciones de servicio de tráfico y que no afecten la propiedad privada en las colindancias con los derechos de vía.